¿Cómo ha sido el infoactivismo latinoamericano en defensa del pueblo palestino y contra el genocidio?

En este post analizamos cómo desde la región hemos accedido a información sobre la causa palestina y el genocidio en curso, cómo han sido los esfuerzos de apoyo y solidaridad desde la región y aspectos clave para evadir la censura, visibilizar la violencia y enfrentar la desinformación.

Contexto

La violencia previa y a partir del 7 de octubre de 2023

La historia de medio oriente, y en particular de los actuales territorios palestinos ha estado marcada por tensiones y violencia. Para entender los ataques del 7 de octubre, hace falta mirar atrás, cuando Palestina era un territorio ocupado por Reino Unido, y las represealias por la partición del Imperio Otomano en la Primera Guerra Mundial.

En ese contexto, los principales representantes del sionismo en Europa empezaban a presionar al gobierno británico para cederles la tierra ocupada y establecer ahí un proyecto de colonización que recibiera a la diáspora judía europea. 

Sería hasta después de la Segunda Guerra Mundial y la traumática experiencia el holocausto, en 1948, que este proyecto se concretaría, dando origen a la Nakba (“Catástrofe”) palestina, en la que hasta 750, 000 palestinos -musulmanes y cristianos- fueron expulsados violentamente de sus territorios por milicias paramilitares sionistas de carácter terrorista, para dar origen al Estado de Israel, creado por mandato de la ONU sobre lo que entonces era Palestina.

Desde entonces, grupos de personas expulsadas y sus descendientes han vivido bajo un régimen tipo Apartheid que excluye de derechos a ciudadanos no judíos, luchan de distintas formas, incluyendo al grupo militante Hamas, por el derecho a regresar a su territorio.

Por décadas, múltiples esfuerzos domésticos e internacionales han buscado poner fin al conflicto y establecer una solución en donde convivan Dos Estados, que no ha sido posible por la creciente radicalización y beligerancia en grupos de poder en el gobierno Israelí y Palestino. 

El 7 de octubre de 2023 la brigada Al Qassam del grupo militante Hamas realizó la llamada Operación Inundación de Al Aqsa, en la que incursionó en territorio ocupado por Israel y realizó una serie de ataques coordinados contra objetivos militares y asentamientos israelíes, así como contra asistentes a un festival de música que se llevaba a cabo en los límites entre los territorios y en el camino de sus objetivos previamente mencionados. En el ataque murieron alrededor de 1200 israelíes, de los cuales aproximadamente la mitad eran civiles de los kibbutzim, 364 eran asistentes al festival de música, 220 eran soldados y 45 policías que respondían a la agresión. También murieron al menos 200 milicianos de Hamás, confundidos inicialmente por el gobierno de Israel como víctimas israelíes. Adicionalmente fueron tomados como rehenes civiles -entre ellos, mujeres y niños- y hechos prisioneros algunos soldados y combatientes israelíes que respondían a la incursión. 

A partir de estos hechos, la represalia israelí sobre todo el territorio de Gaza ha sido indiscriminada y habría cobrado ya cerca de 186, 000 víctimas (al 10 de julio de 2024) de las cuales, la mayoría son mujeres, niñas y niños. Esta reacción bélica desproporcionada y contraria a todo marco de respeto a los derechos humanos continúa en escalada con ataques en otros países de Medio Oriente y atroces acciones en contra de población en situación de refugio, periodistas y ayuda médica humanitaria.

Algunos gobiernos en LATAM (Cuba, Nicaragua, Bolivia, Colombia, Venezuela, Honduras, Chile, Brasil) han mostrado mensajes claros en contra del genocidio al pueblo palestino en Gaza e impulsado manifestaciones diplomáticas en apoyo al pueblo palestino. Sin embargo, según algunos analistas mucho se ha quedado en el plano de la retórica y actos simbólicos de diplomacia, pero no ha ejercido una influencia geopolítica relevante. En el lado opuesto del espectro político, gobiernos como los de Argentina y El Salvador, cuyo presidente Nayib Bukele es descendiente de palestinos cristianos refugiados, se han manifestado abiertamente en favor de Israel, como parte de una oleada reaccionaria que justifica cualquier acto de violencia cometido en favor del expansionismo sionista.

Independientemente de las aciones diplomáticas de los gobiernos, desde la sociedad civil en la región destacamos algunas respuestas estratégicas para visibilizar y denunciar la colonización expansionista y el genocidio que se comete contra el pueblo palestino por parte del Estado de Israel y las potencias occidentales aliadas.

1. Cobertura en español sobre conflicto en Palestina

La información para contextualizar los ataques del 7 de octubre y la ofensiva militar israelí que le siguió suele generarse en árabe, hebreo o inglés, por lo que resulta necesario que existan espacios noticiosos que traduzcan al español la información de manera veraz.

Aunque es un trabajo más bien de tipo periodístico, hacer una cobertura precisa de los sucesos en Palestina y aportar explicaciones en español sobre la historia de la ocupación israelí es fundamental para informar a las audiencias sobre el contexto de las hostilidades, así como para entender algunas de las muestras de apoyo y solidaridad que se dan lugar en el contexto latinoamericano.

Posiblemente uno de los aportes más importantes de estas coberturas son los contenidos de tipo explainer, en los que se narra información crucial para explicar el contexto que permita a las audiencias ver más allá de los hechos del 7 de octubre de 2023.

Aquí algunos ejemplos:

A través de publicaciones en su blog, Amnistía Internacional comparte el post 8 claves para entender el conflicto palestino-israleí y en formato video, AJ+ en Español tiene esta lista de reproducción en YouTube de este tipo de contenidos.

2. Acciones contra la desinformación

Otro aspecto crucial para mantener comunidades informadas y movilizadas es la visibilización y denuncia de la desinformación que se ha incrementado a partir de los hechos del 7 de octubre de 2023.

En este post de Al Jazeera, describen cómo las afirmaciones infundadas y contar sólo un lado de la historia, son algunos de los tipos de contenidos desinformantes que se han utilizado para justificar la represalia injustificada contra Gaza.

Uno de los primeros y más difundidos bulos sobre el ataque del 7 de octubre fue la supuesta decapitación y quema de 40 bebés pertenecientes a las comunidades judías atacadas, así como supuestos actos de violencia sexual cometidos por milicianos de Hamas contra mujeres civiles israelíes. 

Estos bulos generaron una oleada muy significativa de desinformación que fue utilizada para establecer un marco narrativo deshumanizante contra la resistencia palestina que buscaría cortar la solidaridad de movimientos feministas occidentales y escandalizar a la opinión pública en el mundo, con lo que establecería las bases para la justificación de masacres israelíes cometidas precisamente contra población civil palestina, en especial mujeres, niñas y niños y los bombardeos que han destruido prácticamente toda la infraestructura civil en Gaza: hospitales, escuelas, viviendas, fuentes de agua potable, iglesias y mezquitas, entre otras.

Algunos enlaces a videos que buscan contrarrestar estos contenidos desinformantes:

3. Visibilizar la censura por parte de las plataformas

En el transcurso del último año ha cobrado relevancia la necesidad de visibilizar los dobles estándares de moderación de contenidos en las plataformas, así cómo otros tipos de moderación que se convierten en acciones de censura (shadowban, followban, remoción de contenidos, etc).

En esta misma línea, periodistas y personas usuarias que traducen información generada en inglés también son importantes para informar sobre la censura antipalestina:

Enlaces con información complementaria:

4. Confrontar la narrativa sionista

Voces judías, antisionistas y palestinas latinoamericanas

De acuerdo a este anexo de Wikipedia sobre la distribución de la población judía en el mundo, Argentina alberga a una de las mayores comunidades judías del mundo y la mayor en toda Latam, por lo que no es de sorprender que ahí haya numerosas voces judías que se desmarcan de las acciones genocidas del Estado de Israel. Un ejemplo es el colectivo JudíesXPalestina, desde su cuenta  en Instagram, manejada por personas judías argentinas se oponen al genocidio del pueblo palestino y combaten la falsa idea de que ser antisionista significa ser antisemita.

¿Cómo resiste la comunidad palestina en Chile?

En Chile existe las organizaciones Los otros judíos, que también denuncia el genocidio que está cometiendo el Estado de Israel en nombre de todas las personas judías, así como la Coordinadora por Palestina que aglutina a más de 140 movimientos sociales y organizaciones.

En este país incluso existe un club de futbol de primera división, fundado en 1920 por la diáspora palestina: el Club Deportivo Palestino. Este club ha dado numerosas muestras de solidaridad con el pueblo palestino. Quizás uno de los más notables, fue la edición especial de su uniforme en 2014, en donde los números uno fueron estilizados como el mapa de la Palestina previa a 1948.

Posterior a la escalada de violencia del 8 de Octubre, el 11 de noviembre los jugadores del equipo salieron al campo portando la kuffiyeh palestina, como símbolo de solidaridad con el pueblo palestino.

5. ¿Cómo visibilizar y documentar un genocidio que está siendo negado?

Una reflexión sobre la ética al publicar imágenes explícitas

Retomando reflexiones colectivas en este post sobre cómo comunicar hechos violentos, La regla periodística general suele ser evitar exhibir los cuerpos de las víctimas de actos violentos, para evitar su revictimización. Sin embargo, de cara a un genocidio que está siendo negado -y cuando no negado, justificado- y tratado como actos de autodefensa, esta regla general se suspende en favor de su excepción: mostrar los cuerpos rotos, quemados y amortajados de las víctimas, a manera de testimonio póstumo de su estatus de víctimas.

Esta publicación de Times of Gaza en X contiene videos con escenas perturbadoras que dan testimonio de los efectos de los bombardeos contra población civil, periodistas y personal médico en Gaza. A pesar de su crudeza -o debido a ella- son un testimonio necesario ante un mundo que ha ignorado el genocidio.

6. Artivismo en Internet y en las calles

Por último y no menos importante: las comunidades artísticas latinoamericanas aún tienen mucho que aportar para visibilizar y sensibilizar a las personas sobre el genocidio contra Palestina. Existe una diversa producción gráfica, además de otras formas de artivismo como las intervenciones en las calles. 

Otro ejemplo, es la placa conmemorativa dirigida al Museo Memoria y Tolerancia, ubicado en la Ciudad de México, que a pesar de tener como misión educar en la prevención del genocidio y el odio racial y religioso, ha guardado total silencio en el último año sobre los crímenes contra la humanidad cometidos por el Estado de Israel contra el pueblo palestino en nombre del sionismo. Fue colocada el 7 de octubre de 2024.

Este recuento de acciones, aunque no es exhaustivo, ayudan a seguir visibilizando lo que está pasando en Palestina y que las exigencias de alto al fuego sigan circulando. Consideramos que estos aspectos han sido relevantes para que muchas personas en la región accedamos a información y se genere presión hacia gobiernos, instituciones, apoyo y solidaridad.