Si bien, los cuidados deben ser sostenidos de manera comunitaria, las acompañantes de aborto suelen enfrentar la responsabilidad de construir un vínculo de confianza con las personas que acompañan, a la vez que cuidan de su seguridad y privacidad durante el proceso de acompañamiento.

Este vínculo es parte esencial del proceso, pues las personas que necesitan un aborto con frecuencia viven el proceso en contextos donde el estigma o incluso la clandestinidad hacen difícil transitar esa experiencia.

Debido a esta hostilidad del contexto, la gestión de la información a cargo de las acompañantes suele enfrentarse a diferentes riesgos y amenazas.

¿Qué amenazas enfrentan las personas acompañantes de aborto en el espacio digital?

A partir del trabajo que hemos realizado con activistas por el derecho a decidir, consideramos que enfrentan principalmente tres tipos de amenazas digitales:

1. Desinformación

Una de las principales dificultades en el contexto del acompañamiento de aborto es la desinformación. Para abordar este tema en específico, puedes consultar las  recomendaciones sobre cómo combatir la desinformación que dificulta el acceso al aborto. Sin embargo, aunque la desinformación es un riesgo importante a considerar, existen otros riesgos que es necesario abordar. 

2. Ataques digitales

Para empezar a establecer protocolos de prevención y respuesta necesitamos entender las características de las amenazas, así como la manera en la que una puede articularse con otras e incrementar el daño que puede causar. Para ello, retomamos algunos elementos de la Tipología de ataques digitales disponible en Protege.LA, empezando por diferenciar dos grupos de ataques digitales, según la forma en la que generan la vulneración:

  • Ataques digitales mediante conductas humanas: Implican abusar o aprovecharse del componente humano y las relaciones sociales con tal de generar un daño. 
  • Ataques digitales mediante vulneraciones técnicas: Implican abusar del diseño de la tecnología para modificar o romper aspectos técnicos con fines maliciosos.

Si bien, los distintos tipos de ataques de un grupo pueden combinarse con los ataques del otro grupo y potenciar sus efectos, entender cada tipo de ataque por separado nos ayuda a tener claridad en cuanto a las acciones de prevención y mitigación que podemos aplicar. 

3. Vulneración de datos personales por parte de intermediarios

Información como tu nombre, tus cuentas en línea, teléfono, conversaciones en chats, fotos e imágenes enviadas o recibidas, búsquedas en línea, lugares visitados puede incrementar tu riesgo de criminalización por parte de actores estatales (si tu contexto es restrictivo), así como de estigmatización, acoso u otras formas de violencia por parte de grupos antiderechos.

La desinformación y los ataques digitales no son la única manera de vulnerar a las personas que buscan un aborto o a sus acompañantes. Por eso es importante hablar de otro aspecto estrechamente relacionado: la gestión de la privacidad.

¿Por qué es importante la gestión de la privacidad? 

Incluso en contextos donde el aborto es reconocido como derecho, con frecuencia aún se encuentra bajo un fuerte estigma, por lo que las personas que buscan acompañamiento pueden sentirse incómodas o con miedo frente a la posibilidad de que personas no autorizadas sepan que necesitan un aborto. A esto se suma que existen grupos antiderechos que activamente buscan boicotear el acceso al aborto a través de mecanismos que van desde el engaño mediante medios digitales, hasta la vulneración de datos personales, el acoso y la intimidación física.

Cuidar nuestro rastro digital 

Seguramente ya sabes que las grandes plataformas digitales continuamente monitorean y extraen datos como: historial de búsqueda, páginas visitadas, lugares visitados, texto e imágenes enviados a través de servicios de mensajería, etc. En principio, si tu información no está cifrada, todo lo que envías y recibes puede ser visto por intermediarios, como tu ISP (proveedor de servicio de internet). Esto evidentemente se vuelve un problema mayor en contextos de criminalización, pues basta con que una autoridad solicite una copia de tu información a una empresa para que ésta la entregue. De igual forma, si realizas búsquedas de información sobre aborto desde tu sesión personal esto puede activar rastreadores que le dicen a Google (o a cualquier buscador que recolecte datos para vender publicidad) “acá hay alguien buscando información sobre cómo acceder a un aborto, mándale un anuncio sobre eso”, lo que pone a la persona en cuenstión un tiro al blanco de anuncios relacionados con el tema, incluyendo aquellos con propaganda engañosa antiderechos.

Medidas para proteger la seguridad y privacidad digital en la defensa del aborto

Para mitigar posibles fugas de información, existen varias alternativas que se pueden utilizar en conjunto. Algunas pueden sonar complicadas al inicio, pero en realidad sólo es cuestión de entender cómo nos ayudan para irnos familiarizando con su uso.

1. Utilizar contraseña en todos tus dispositivos. De esta manera, si te llegan a quitar tu teléfono o equipo de cómputo, será más difícil que puedan extraer tu información y que le den un mal uso.

2. Realiza respaldos periódicos de tu información. De este modo, aún si pierdes o te roban tu equipo, podrás seguir teniendo acceso a una copia de tu información, lo que a su vez se traduce en que no se interrumpa la comunicación con las personas a las que acompañas.

3. Activa la verificación en dos pasos para todas tus cuentas. Así, aún si alguien logra romper tu contraseña, tendrás una segunda barrera de protección antes de que puedan acceder a alguna de tus cuentas.

4. Revisa y actualiza métodos alternativos de recuperación de cuentas. De este modo, si llegas a perder el acceso por una vía, puedes contar con algún método de recuperación. Si colaboras en una colectiva, pueden compartir algunos métodos de recuperación.

5. Establece acuerdos básicos de seguridad para el tratamiento de la información personal, tanto la tuya como la de las personas con las que mantienes comunicación. Recuerda que hay actores que tratarán de obtener información sensible a través de engaños u otros métodos (como el phishing), ya sea para darle mal uso, difundirla (doxing) o para incitar a otros actores a ejercer algún tipo de violencia (acoso, amenazas, conductas ofensivas, conductas discriminatorias, conductas que incitan al odio, etc).

6. Si tu contexto es muy restrictivo, una forma de preservar tu identidad es separar tus cuentas de uso personal de las que usas para hacer acompañamiento. Por ejemplo: un correo electrónico y cuentas de redes sociales alternas, otro número de teléfono secundario que no esté vinculado a tu identidad y uso de navegación segura y privada.

7. Recuerda que la información cifrada viaja más segura. Implica cifrar tus archivos y utilizar chats o videollamadas por canales cifrados para comunicaciones más seguras. Otra acción recomendada -si llevas una documentación de casos- es codificar la información personal (tuya o de la persona a la que acompañas) bajo un sistema de alias o pseudónimos, buscando incorporar algún tipo de cifrado en la gestión de la información. Esto puede ser especialmente importante en contextos de criminalización, pues las plataformas (u otros intermediarios) pueden entregar información privada (como las conversaciones en un chat) si las autoridades lo solicitan.

8. Si tú o la persona a la que acompañas viven en un contexto hostil y necesitan buscar en internet información sobre aborto, pueden utilizar herramientas como: navegadores privados, navegadores anónimos, VPN (Virtual Private Network) y motores de búsqueda que no se asocien con tus cuentas ni guarden historial de búsquedas asociadas a un perfil. La navegación privada (o modo “incógnito”) ayuda a evitar que grupos antiderechos utilicen nuestras búsquedas para dirigirnos publicidad engañosa, sin embargo nuestro Proveedor de Servicios de Internet (ISP) aún puede ver los sitios que visitamos. La navegación anónima hará más difícil asociar a nuestra persona (y nuestra dirección IP) con nuestra actividad en línea. Otra alternativa para lograr esto es el uso de una VPN (Virtual Private Network), que además de servir como un “túnel” de navegación cifrada -nuestro proveedor de servicios de internet no puede ver los sitios que visitamos- puede ayudarnos a acceder a información censurada en el país desde donde se hace la búsqueda.

9. Conoce las herramientas de reporte y atención de incidentes dentro de cada una de las plataformas o servicios en línea. Si lo haces, tendrás más herramientas para reportar agresiones e intentos de vulnerarte.

10. Ten una red de apoyo en temas técnicos y legales, para que puedas acudir a ella cuando detectes ataques. Para temas relacionados con plataformas y seguridad digital puedes contactar a @socialtic @info_activismo  y/o escribir a seguridad@socialtic.org

11. Documenta cualquier incidente extraño que tú o personas colaboradoras lleguen a tener.

12. Revisa periódicamente tus acuerdos y prácticas de seguridad digital.


Recursos para ampliar: